Cultura de Paz: Su vínculo con las Neurociencias y el Arte

Las manifestaciones artísticas son una vía, por la cual se expresan emociones, ideologías y creencias. Cada cultura y expresión humana, teniendo sus particularidades identitarias, todas tienen felices coincidencias: las Artes. A su vez, las Artes son el grado más evolucionado de las manifestaciones en los seres humanos.

En el aspecto neurológico, la música y las artes estimulan las conexiones neuronales en el hemisferio derecho. De acuerdo a las investigaciones científicas del Dr. Roger Sperry, Premio Nobel de Medicina en el año 1980, explica que al estimular el hemisferio derecho se desarrollan la percepción holística y la expresión de las emociones, reduciendo considerablemente la producción de cortisol, esta última, es la sustancia que produce el estrés y la tensión muscular.

Desde esta perspectiva biológica, la música y las artes son también formas de expresión que causan bienestar. En el caso de la música, por frotación de las partículas del aire, generan una serie de vibraciones que alteran los estados bioquímicos en los organismos vivos, impactando el funcionamiento de los órganos del cuerpo y a su vez, al modificar estados bioquímicos, se estimula la producción de hormonas que producen el placer como son: adrenalina, oxitocina, serotonina y dopamina. Como ya lo mencionamos, son sustancias que producen una importante experiencia placentera en el cuerpo, y por ende, este conjunto de cambios anatómicos, influyen de manera determinante en las emociones y las expresiones conductuales que nos llevan a expresiones de cultura de paz.

Las expresiones artísticas, son un gran promotor social y de cultura de paz, que entre otras cosas, vinculan y establecen relaciones sociales e incluso políticas. Estimulan y fortalecen los vínculos de amistad y solidaridad entre las comunidades y los países.

Las artes son un vínculo de denuncia social. El movimiento del expresionismo alemán, el surrealismo y especialmente, el dadaísmo fueron expresiones políticas a través de las cuales los artistas protestaban contra un mundo herido por las guerras del momento. Las artes, son fuertes promotores de la propaganda ideológica de acuerdo a su tiempo y a su clase, representan una realidad de la cotidianeidad y evocan la reflexión con la vida existencial de quien busca una expresión menos materialista de la vida, trascienden en el tiempo y promueven ideas que traspasan fronteras y tiempo de vida.

De acuerdo a la neurociencia, las artes son un determinante generador de formas estéticas, ya que se enfoca al estudio de lo abstracto y la vida subjetiva en los seres humanos, algo inusual en nuestra actual vida pragmática y funcionalista. Las expresiones artísticas también conllevan estrategias didácticas, dado que por este medio se pueden transmitir desde teorías sociales, las matemáticas y la disciplina en la educación.

El arte-terapia es considerado a la fecha, como una serie de técnicas para abordar problemas psicológicos y tratamientos de educación especial y de rehabilitación.

La neurociencia, nos dice que las artes generan un vínculo directo con el inconsciente ya que, al propiciar la libre expresión de emociones, imposibilita que los mecanismos de defensa intervengan para obstaculizar la mejora de un tratamiento psicológico, por tal motivo las artes son una necesidad integral e insustituible en la vida existencial de los seres humanos y proporcionan mecanismos naturales para general condiciones para la paz.

Una sociedad inteligente produce generaciones trascendentales mediante las ciencias y las tecnologías, los deportes y las artes. Solo una visión que incorpore estos elementos en nuestras juventudes, logrará humanidades más justas, sensibles, productivas y sobre todo, comunidades pacíficas, y predominante-mente personas en plenitud de la Cultura de paz.