A la tremenda Corte no le gusta Acapulco

ACAPULCO

Acapulco | Fiesta Americana Travelty

La tremenda corte está en teleofertón navideño y quiere que sus mejores amiguis, o sea ellos mismos, tengan una linda Navidad llena de fideicomisos para disfrutarlos en la intimidad de sus lujosos y finos despachos. Después de una muy sesuda reflexión, sorpresivamente el ministro Laynez Potisek llegó a la conclusión de que los 15 mil millones de los fideicomisos de la élite del poder Judicial, no deben de ser entregados a los damnificados de Acapulco y Guerrero porque, en resumen, son gente de pésimo y reguetonero gusto que no se merecen todos esos recursos, pues en manos de sus verdaderos dueños no podrían estar mejor. La Suprema no tiene porque andar haciendo milagros ni enderezando jorobados y menos metida en la reconstrucción de un lugar turísitico para morenacos y macuarros que, como diría el humansita Leo Suckerman, tal vez ni merece ser rescatado.

Y sí, el ministro Laynez Potisek tiene toda la razón, para qué ser solidario y empático con los amolados, cuando se puede ser buenaodita con los millonarios excéntricos que no quieren pagar impuestos, como cuando fue procurador fiscal de Calderón y mi licenciado Peña, que paguen los pobretones que para eso están.

Bien hecho por la ministra Piña -que tiene mañas judiciales que no son de niña- al jugar con los sentimientos de los acapulqueños y de AMLO, asegurando que iba a entregar el billete y, justo cuando ya tenían las manos estiradas, ¡tómala, barbón!, escondió el billete a la malagueña. Muy bonito, muy fino, muy justo y muy elegante.

Y lo mejor de todo es que el poder judicial celebró esta lindísima historia, amparando a Cabeza de Vaca, la misma Vaca. ¡Wonderful! No dudaría que los ministros ya deben estar buscando guajolote para hacerle un mole a este prohombre que nunca ha atracado en despoblado ni lo volvería a hacer. Y a manera de cereza en el pastel, la ministra Yasmín Esquivel, linchada por plagiaria por la oposición, ahora anda de quedabién con sus enemigos derechairosos concediéndoles que las corridas de toros vuelvan por sus fueros, para beneplácito del ChikiliQuadri. Pronto abrirá la temporada de caza de la vaquita marina y de los pandas de Chapultepec. ¡Chidísimo!

A la Tremenda Corte nada más les falta cuajar de amparos a Ricardo Anaya y liberar a García Luna Productions para que se incorpore a la campaña de Xóchitl que, alegremente, ya está chocando con el iceberg.

Laynez Potisek quiere que Acapulco se convierta en Kafkapulco.