El regreso de la sonda espacial OSIRIS-REx

La sonda espacial OSIRIS-Rex aterrizará en la Tierra con muestras del asteroide Bennu; científicos esperan obtener respuestas sobre la aparición de la vida en la Tierra

OSIRIS-REx sobrevolando la Tierra. / Gráfic: NASA’s Goddard Space Flight Center/University of Arizona

El 24 de septiembre aterrizará en la Tierra una capsula espacial que trae muestras del peligroso asteroide Bennu. Los científicos esperan conocer sobre la formación del Sistema Solar y la aparición de la vida en la Tierra; así como planear la defensa de la Tierra contra la colisión de este asteroide.

Bennu

En la mitología del antiguo Egipto, existió una deidad llamada Bennu, representada como una ave, tal vez una garza ahora extinta, llamada garza Bennu y descubiertos sus huesos en excavaciones en 1977.

Bennu es una deidad autocreada, relacionada con el Solla creación y el renacimiento, se considera es la inspiración para el mito del Ave Fénix en la mitología griega.

Bennu es el nombre dado a un asteroide, descubierto el 11 de septiembre de 1999. Es un asteroide del tipo Bricos en carbono y silicatos y pobres en metales. Son parte de los tipo C, ricos en carbono, los más abundantes en el Sistema Solar, hasta el 75 por ciento de ellos. Los asteroides tipo B presentan una menor o nula absorción de radiación ultravioleta y reflejan más luz que los tipo C, aún así, Bennu refleja solo el 4 por ciento de la luz del Sol.

Se considera que estos asteroides han cambiado poco desde la formación del Sistema Solar, hace 4500 millones de años, por lo que encierran los secretos del inicio del Sistema Solar y tal vez contengan los componentes esenciales que originaron la vida en la Tierra. Son verdaderas cápsulas del tiempo.

Bennu tiene un tamaño de más de medio kilómetro, parece haber aglutinado parte de otros asteroides y además parece estar vació de un 20 por ciento a un 40 por ciento. Le lleva 4 días y 17 minutos rotar sobre su propio eje. Le da una vuelta al Sol en 1.19 años o 435 días, se aleja hasta tocar la órbita del planeta Marte (1.4 UA de afelio) y disminuye su distancia al Sol hasta algo menos de la órbita de la Tierra (0.9 UA de perihelio), esto significa que cruza la órbita de la Tierra.

Bennu es un asteroide peligroso, el 23 de septiembre de 2060 pasará a 750 mil km de la Tierra ¡el doble de la distancia a la Luna! Y entre los años 2178 y 2290 podría colisionarnos. Siendo el día de más riesgo el 24 de septiembre pero del año 2182 ¡dentro de 159 años!

Por si fuera poco ¡Bennu se desvía de su trayectoria! Lo que aumenta el riesgo de colisión. Mediante el efecto Yarkovsky, Bennu recibe luz solar de un lado y luego la emite como radiación, ocasionando un empuje hacia el lado opuesto, lo que modifica su trayectoria en 0.29 km por año.

Aunque se ensayó la desviación del asteroide Dimorphos que orbita a Didymos en 2022, la NASA está interesada en conocer más sobre Bennu y planear una defensa eficiente de la Tierra.

Por ello, envió a la sonda espacial OSIRIS-REx en una ambiciosa y emocionante aventura para recoger muestras de Bennu.

OSIRIS-REx

El 8 de septiembre de 2016 despegó el cohete Atlas V con la sonda espacial OSIRIS-Rex (Origins, Spectral Interpretation, Resource Identification, Security-Regolith Explorer), su misión, alcanzar al asteroide Bennu, estudiarlo dos años, aterrizar, tomar muestras del regolito (el suelo), despegar y volar de regreso a la Tierra. Una vez sobrevolando nuestro planeta, OSIRIS-REx soltará una cápsula con las muestras del asteroide que aterrizará en Utah, Estados Unidos, mientras la sonda espacial continua su camino rumbo al peligroso asteroide Apophis, a donde llegará en 2029. En esta segunda etapa, no habrá regreso con muestras.

El 3 de diciembre de 2018 OSIRIS-REx entró en órbita de Bennu, en donde pasó dos años estudiándolo. El 20 de octubre de 2020 descendió en la planicie «Ruiseñor» y en una dramática maniobra estiró el brazo robot y tomó muestras, se esperaba obtener de 60 gr a 1 kg, pero en el proceso una roca se atoró en la portezuela y algo del material obtenido se escapó. Una vez verificado el material, se guardó el contenedor. Se piensa que se recogieron 400 gr, más del mínimo esperado. La gran sorpresa fue al tocar el suelo, pues el brazo robot se hundió, mostrando que el suelo está suelto, similar a una piscina de pelotas.

La misión ha sido un éxito. OSIRIS-REx vuela de regreso a la Tierra a la increíble velocidad de 23 mil km/h. Será el domingo 24 de septiembre del presente año, cuando se separe la cápsula de muestras, entre en la atmósfera terrestre a las 8:42 a. m. (hora del centro de México) y aterrice 13 minutos después.

OSIRIS-REx sobrevolando la Tierra. | Gráfico: NASA’s Goddard Space Flight Center/University of Arizona

Mientras tanto, la sonda espacial encenderá sus motores y tomará ruta hacia el asteroide Apophis, un asteroide peligroso para la Tierra. Cálculos iniciales indicaban una colisión para el 13 de abril de 2029, cálculos posteriores con más observaciones eliminaron esa posibilidad, sin dejar de considerarlo peligroso.

Apophis mide 370 metros de diámetro. El asteroide que explotó sobre la ciudad de Chelyabinsk, Rusia, en 2013, era de 19 metros y explotó con una potencia de 20 bombas atómicas como la de Hiroshima, si no causó un daño equivalente, es porque explotó a 20 km de altura, mientras que la bomba atómica lo hizo a 600 metros.

Las muestras de Bennu están por llegar a la Tierra y pronto conoceremos sus secretos.