Kansas City se lleva la corona
El equipo logró el tercer título de su historia, el segundo en tres años, derrotando a las Águilas de Filadelfia en la edición 57 del Super Bowl.

A pesar de estar lesionado, Mahomes se consagró en lo más alto de la NFL, al ser nombrado el Jugador Más Valioso (JMV) del partido, escribiendo así mismo su leyenda en la NFL. Y por si fuera poco le ganó a Jalen Hurts, en el primer juego de mariscales afroestadounidenses en el Super Bowl.
Con la actuación de Mahomes, la liga de deporte puede estar tranquila. El mariscal demostró que su talento puede convertirlo en ese elemento que pueda cubrir el hueco que dejó el siete veces ganador del Super Bowl, Tom Brady, tras su retiro. Si Filadelfia tardó 11 jugadas para llegar a las diagonales, Mahomes movió el balón en seis drives para empatar el juego. En tres minutos colocó el ovoide en zona roja y conectó con su mejor pieza, Travis Kelce.
Las dos mejores ofensivas de la temporada mostraron el músculo desde el segundo uno. No se guardaron nada. Las Águilas tomaron la posesión del balón. Su protagonismo en los dos sectores del campo comenzó a carburar. No obstante, cometieron el primer error de la tarde en el segundo cuarto.
Del otro lado del sendero, un brillante Hurts no se cruzó de brazos y sumó su tercera anotación, además de la conversión, para otra vez cerrar el juego (35-35). ¿Hasta dónde llegará? Él pondrá los límites, así como Brady lo hizo en sus 23 años de trayectoria.