IP, dispuesta a ‘hacer las paces’ con AMLO tras rechazo a reforma eléctrica
Por Leticia Hernández
Una vez que la reforma eléctrica del presidente Andrés Manuel López Obrador fue desechada, el sector privado reiteró su disposición a trabajar en colaboración con el Gobierno y sociedad civil para lograr que México tenga un sistema eléctrico a favor del crecimiento económico y sustentable del país, señaló el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
“Es necesario asegurar que existan canales de comunicación y cooperación entre el Gobierno, las empresas y las organizaciones de la sociedad civil, en beneficio del desarrollo económico y la sustentabilidad ambiental de nuestro país. El Consejo reitera su disposición de seguir colaborando para mantener una industria eléctrica sana, fuerte y competitiva”, expuso.
En un comunicado por separado, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) señaló preocupación porque desde el gobierno puedan darse “maniobras” para impedir la operación de los generadores privados de electricidad.
A partir del diálogo, podrían impulsarse mejoras viables a través de las leyes secundarias sin necesidad de reformas constitucionales, consideró la confederación, lo que implica una visión de largo plazo en donde se tenga una Comisión Federal de Electricidad fortalecida.
“Se requiere visión de largo plazo, donde se tenga una CFE fortalecida, un país con energías limpias, donde se respete el Estado de Derecho, se mejore el servicio a la sociedad, se respeten los acuerdos internacionales, se fomente la inversión para así contar con suficiente energía para el crecimiento que requiere el país”, apuntó el organismo.
El CCE expresó su interés en trabajar para impulsar condiciones que incentiven la inversión, la innovación y la competencia en la economía y confirmó que el sector empresarial seguirá actuando con pleno respeto a la ley, en apoyo al desarrollo incluyente y sustentable que requiere el país.
Entre los 14 organismos que integran a la máxima cúpula empresarial del país, está el sector industrial, que representa el 60 por ciento del consumo eléctrico del país, así como los sectores comercial, agropecuario, turístico y financiero, y a diversas empresas que han desarrollado e invertido en proyectos de generación eléctrica.
Los organismos empresariales, a través del CCE, reconocieron la responsabilidad de los legisladores federales en el debate sobre la reforma eléctrica que finalizó sin haber alcanzado mayoría calificada. Sin embargo, se puso en evidencia la falta de debate técnico y racional al ignorar todos los argumentos de las más de 150 horas de discusión de expertos a través del ejercicio del Parlamento Abierto.
“Si falló el intento de aprobar la reforma del Ejecutivo fue porque no se escuchó a los ciudadanos, a los sectores y a los expertos”, afirmó la Coparmex.