DIPUTADOS DAN LUZ VERDE A REFORMA DEL TRANSPORTE FERROVIARIO.

El uso de trenes como medio de transporte civil será una realidad en México durante los próximos años.

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La Cámara de Diputados aprobó hoy la reforma al artículo 28 constitucional para promover el uso de las vías férreas en el transporte de pasajeros. Aunque la iniciativa fue respaldada por todos los grupos parlamentarios, la oposición pidió que las nuevas rutas de ferrocarril se construyan sin incurrir en sobrecostos ni dañar el medio ambiente, como acusaron que sucedió con el Tren Maya.

Tras un debate de seis horas, el proyecto fue aprobado unánimemente con 472 votos a favor. Aunque se presentaron 135 reservas al dictamen, ninguno de los señalamientos de los partidos opositores fue aceptado, y los de Morena y sus aliados fueron retirados.

En una conferencia previa a la sesión, Ricardo Monreal, coordinador de la bancada de Morena, celebró que la iniciativa “recupera la rectoría del Estado en materia de transporte ferroviario y privilegia el transporte de pasajeros”, criticando la privatización de las vías férreas en los años 90 por los gobiernos “neoliberales”.

Monreal explicó que la minuta permite al Estado prestar el servicio público de tren de pasajeros y también concesionar esta responsabilidad a los actuales concesionarios del transporte.

Jorge Armando Ortiz (PT) argumentó a favor de la reforma, recordando que los ferrocarriles nacionales fueron privatizados por los presidentes Ernesto Zedillo y Vicente Fox, quienes, según él, entregaron este patrimonio a empresas extranjeras y luego trabajaron para ellas como ex presidentes.

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Los diputados que apoyan la iniciativa subrayaron que promover el tren como medio de transporte de pasajeros aliviará el tráfico en carreteras y aviones, fomentará el desarrollo regional de las comunidades por donde pase el ferrocarril y ofrecerá una opción de movilidad sostenible y menos contaminante.

Por su parte, la oposición, aunque votó a favor de la reforma, exigió que los nuevos proyectos ferroviarios se realicen con transparencia y respeto al medio ambiente, además de garantizar la seguridad de los pasajeros frente al crimen organizado.

El panista José Manuel Hinojosa, acompañado de otros legisladores que mostraban fotos de áreas de selva taladas para la construcción del Tren Maya, denunció que dicho proyecto causó un “ecocidio” en las regiones afectadas, además de estar marcado por la corrupción y el nepotismo en la adjudicación de contratos.

El PAN no se opone a los trenes de pasajeros, pero expresa preocupación por posibles problemas de corrupción y opacidad en las nuevas rutas propuestas por la 4T. Hinojosa afirmó que el PAN votaría a favor de la iniciativa, pero presentaría reservas para asegurar la operatividad, seguridad y viabilidad presupuestaria de los trenes, además de considerar la opinión de especialistas medioambientales.

Rubén Moreira, coordinador de la bancada priísta, cuestionó el origen del presupuesto para el proyecto ferroviario, advirtiendo que podría aumentar la deuda del país a 2 billones de pesos. Propuso que los concesionarios de trenes de carga también ofrezcan transporte de pasajeros, priorizando comunidades aisladas, pero su propuesta fue rechazada.

Sergio Gil y Hugo Luna (MC) apoyaron la reforma, pero insistieron en que no se debe dar un «cheque en blanco» al gobierno. Exigieron que se considere la inversión privada y que los proyectos no se conviertan en «proyectos faraónicos» llenos de corrupción y daño ambiental.