Día mundial del medio Ambiente
Hoy, 26 de enero, conmemoramos el Día Mundial de la Educación Ambiental, declarado así desde junio de 1972 en la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente celebrada en Estocolmo, Suecia. Quienes compartimos la convicción sobre el poder transformador de la educación no podemos dejar pasar una valiosa oportunidad como ésta para hacer una reflexión sobre la urgente agenda del cambio climático y el papel de la educación para la formación de una ciudadanía comprometida con el cuidado de la casa común.
La prospectiva que se avizoraba en 1972, que llevó a la consagración de este día, desafortunadamente parece haberse materializado con creces: en los últimos 50 años el modelo de desarrollo económico imperante ha agudizado un estado de estrés generalizado sobre el planeta, acelerando el cambio climático con consecuencias cada vez más graves que se viven en todos los rincones del mundo. Basta mencionar, para el caso mexicano, los efectos del histórico estrés hídrico que azota a nuestro país desde 2020 y cuyas consecuencias volveremos a padecer en la primavera entrante; también, los efectos del calentamiento global, que en nuestro país es de 1.4°C, cifra por encima de la media global, lo cual ha provocado un aumento de la temperatura promedio del país de 2.4°C sólo entre 1985 y 2020.