La figura y la obra de Elena Garro se reivindican

Este 22 de agosto se cumplen 25 años de la muerte de la autora de Los recuerdos del porvenir, quien falleció prácticamente en el olvido

Este martes se cumplieron 25 años de la partida de Elena Garro, quien es considerada como una de la plumas pioneras del realismo mágico. Foto: Pedro Valtierra / Cuartoscuro

Acosada aún por la polémica por supuestamente haber delatado a 500 intelectuales como organizadores del movimiento estudiantil de 1968, cuando Elena Garro murió, el 22 de agosto de 1988 en un hospital de Cuernavaca, muy poca gente asistió a su funeral. No hubo laureles, ni homenajes nacionales.

Hoy, que se cumplen 25 años de la partida de quien es considerada como una de las plumas pioneras del realismo mágico, su obra y su memoria gozan de un mayor reconocimiento.

“En estos 25 años ha cambiado la percepción de Elena Garro. Y, si bien, desde antes de su muerte ya había comenzado a recuperar un gran público lector, los últimos 10 años han sido clave para su difusión y estudio. Nuevas generaciones conocen la importancia de su figura pública, al igual que de su obra, con un gran valor literario y de reflexión ética y política”, asegura Lucía Melgar, doctora en Literatura Hispanoamericana por la Universidad de Chicago y estudiosa de la obra de Garro, en entrevista.

La especialista comenta que este reconocimiento se debe en gran parte a que desde de la década de los 90 en México y el mundo comenzó a florecer un creciente interés por recuperar a mujeres autoras que antecedieran a las que estaban publicando ya al borde del siglo XX, principalmente impulsado por grupos feministas.

“El movimiento feminista ha sido fundamental para el reconocimiento de la obra de Elena Garro, aunque ella no se consideraba feminista, sí se puede mencionar que su obra tiene muchos elementos de crítica al sistema social, a los prejuicios, a la discriminación y la violencia contra las mujeres. Esto ha permitido que se hagan lecturas distintas que no están atravesadas necesariamente ni por su figura personal ni por temas políticos, aunque todavía persisten versiones encontradas de Garro”, afirma Melgar.

“Es muy destacable su estilo, su recuperación de la oralidad, su prosa poética y cromática, así como su increíble manejo de lo fantástico”, explica la investigadora, quien escribió el prólogo de los cuentos de la obra completa de Garro publicada por el Fondo de Cultura Económica (FCE).

Entre los libros de narrativa se encuentran La semana de colores, Andamos huyendo Lola, Reencuentro de personajes, y Memorias de España, que es un libro de testimonios.